Contenedor Dry Van: qué son y para qué se utilizan

Los envíos a través de vías marítimas suelen ser muy solicitados en todo el mundo. Las razones abundan, pero pocas veces el público toma en consideración aspectos como la logística implicada. De hecho, la mayoría de las veces los criterios de selección son los costos y los tiempos de entrega. Sin embargo, importa incluso el diseño de los contenedores marítimos implicados.

Contenedor Dry Van

Contenedor Dry Van

Uno de los contenedores más populares es el contenedor Dry Van, principalmente debido a su versatilidad; y es que permite cargar una amplia variedad de mercancías. Por ende, como proveedores de este tipo de servicios, creemos conveniente describirlo con lujo de detalles. En el siguiente artículo hablaremos sobre su función, aspectos de diseño, su clasificación y utilidad en la industria de los envíos.

¿Qué es un contenedor Dry Van?

Un contenedor Dry Van es una especie de remolque de camión hermético y sin control de temperatura utilizado para llevar mercancía. Dichas condiciones, lo hacen idóneo para llevar cargas secas no perecederas que además no sufran debido a los cambios de temperatura. A pesar de ello, impiden el paso de humedad, agua, luz solar, polvo y demás contaminantes para puedan deteriorar su contenido.

Por lo general, los contenedores Dry Van se fabrican en acero COR-TEN o en aluminio, siendo este último más popular en el pasado. Y tal como sugiere la imagen de un contenedor, tiene un techo rígido y paredes laterales hechas de acero corrugado; mientras que el suelo suele ser de madera. Las puertas son de dos hojas y se abren por la parte trasera.

Tanto el tamaño, como la forma y las características de los contenedores marítimos se define a través de la norma ISO-668:2. Según sus estándares, las dimensiones del contenedor Dry Van son 2,40 m de anchura y 2,60 m de altura. Y como explicaremos más adelante, su longitud puede variar existiendo modelos de 20 y 40 pie (6 y 12 metros respectivamente), con excepciones de 10 y 30 pie también.

Tipos de contenedores Dry Van

Existen muchos tipos de contenedores marítimos en el mercado, y también es común que cada uno tenga sus propias subdivisiones. Los contenedores Dry Van no son la excepción, así que procedemos a clasificarlos. Para ello, nos basamos en dos criterios generales: el tamaño y el material de fabricación. De igual forma, estos pueden modificarse para adaptarlo a ciertas cargas.

Según el tamaño

La norma ISO 668 define también los tamaños de los contenedores Dry Van, como es de esperar. Con base en ello, existen dos subtipos: el 20′ y el 40′; y, como es de esperar, las dimensiones de este último superan las del primero tanto en largura, como en volumen y en su capacidad. Por ende, pueden soportar cargas mucho más pesadas de lo habitual.

Según material de fabricación

Como ya indicamos, los contenedores Dry Van también se pueden clasificar en función del material usado para su fabricación. Pueden ser de aluminio, aunque estos ya no se producen con tanta frecuencia; y de acero COR-TEN, un material reconocido por su elevada resistencia y, por ende, durabilidad. Estos últimos son los más utilizados en la industria de envíos actualmente.

Utilidad del contenedor Dry Van

El contenedor Dry Van es, literalmente, el más utilizado. Las empresas del sector están de acuerdo en que un 90% de la mercancía enviada por vías marítimas se cargan justo en estos contenedores. Y no es de extrañar dada su versatilidad a pesar de que no se usa para almacenar alimentos ni productos farmacéuticos; recordemos que las condiciones ambientales suelen afectar la calidad de este tipo de mercancía.

Dejando esto de lado, los contenedores Dry Van son adecuados para prácticamente todo tipo de mercancía debido a su hermeticidad. Además, su capacidad también es variable, por lo que pueden servir para llevar cargas de diferente peso y tamaño. Por ejemplo, los de acero suelen proporcionar una capacidad cúbica interna superior, mientras los de aluminio toleran más peso.

Por último, los contenedores Dry Van también permiten la consolidación de la carga FCL y LCL. Este es un procedimiento que permite que múltiples cargadores consoliden su carga en un solo contenedor, lo cual puede reducir los costos del envío. Muchas empresas ofrecen esta facilidad a los consignatarios interesados; pero, claro está, para ello deben contar con este tipo de contenedores.